Ofrenda
Estuve entre las sienes que te enmarcan sin sentirme prohibida, en espera de escuchar mi nombre con forma de tiempo entre tus dedos. Sentí la vida que daba vuelta en mi cintura para poder mirarme de frente. Me detuvo el…
Estuve entre las sienes que te enmarcan sin sentirme prohibida, en espera de escuchar mi nombre con forma de tiempo entre tus dedos. Sentí la vida que daba vuelta en mi cintura para poder mirarme de frente. Me detuvo el…
Las notas brillan sobre la estera que danza entre flores, arabescos y nidos. Acaricio las teclas muertas, el marfil de espaldas, su luz velada. Y me evaporo en tu pecho inmersa en el vaho del cortinaje donde el céfiro preso…
Imagino una danza de gaviotas alrededor de una mesa dispuesta para celebrar la vida, cuando el olvido corra por fin las espesas cortinas que dejan los rencores en la calle. Y una nave azulina estremece las aguas taciturnas con bodegas…
Van pasando los años y uno acumula cosas inservibles (la vida es una gran coleccionista de mariposas muertas) Alfileres de plata, relojes del abuelo, minerales y fósiles, fotos en blanco y negro., y libros, siempre libros. Versos, siempre versos. A…
Es más difícil leer el silencio que mil palabras de virtud entre líneas. Más certero definirlo que ordenar y entender lo dicho. Sólo aquél que le escucha reconoce su fuerza y lo practica. Triunfa el no decir, a decirlo todo.…
Toda toda verbo y carcomida, como el libro de las horas.
LA CONVIVENCIA Últimamente hay mucha violencia en el pueblo. Los vecinos discuten acaloradamente y algunos llegan a las manos, los niños se tiran piedras a la salida del colegio, las mujeres se pelean por cualquier nimiedad y hasta los perros…
Cada cien siglos nace la flor del sueño y al instante muere Floreces en el huerto que los dioses cultivaron bajo la cúpula en la que sola habito
Sobre el trinche de su recámara yace la fotografía de sus padres. Sonrientes, ignorantes de la calamidad que en negra cascada les depara la vida. Desde la cama, repasando los momentos felices, él distraído, les observa. ¿Alguna vez fue simple…
Me resisto al naufragio de la resignación, rodeando la esperanza que nunca se termina. Con un nido absorto de palabras rotas y latidos fragmentados, y la abyecta incertidumbre incrustada en la frente de mis huellas y un nudo de gargantas…